Ser en la vida lo que uno desea ser: el mundo es de los arriesgados

Consejos para emprendedores:
  • Para hacer bien un trabajo, lo primordial es hacer lo que uno desea, hacer lo que nos apasiona. Si es algo que todavía no ha llegado no hay que desesperarse, sino seguir buscando. Hay que seguir nuestro instinto, trabajar sobre lo que se tenga un buen presentimiento, aceptando consejos de otros, sin llegar a perder la naturaleza inicial de nuestras ideas, y centrándonos en los objetivos de nuestros posibles clientes para cubrir sus necesidades.

  • Hay que dejar fluir el negocio. Es recomendable enfocarse y centrarse en algo concreto. No hay necesidad alguna de hacer todo a la vez, ya que cuando se quiere tener cierto control sobre todo, se daña la parte de emprendimiento.

  • Se dice, que el exceso de conocimiento no deja emprender, por ello, la ignorancia puede ser una buena consejera, ya que desde ese punto se pueden buscar mejor formas para hacer las cosas, entendiendo la posición de los clientes. 

  • Investigar, observar.. Hay que interesarse por conocer las oportunidades, fortalezas y debilidades del mercado al que se pretende acceder. Hay que analizar la competencia para aprender de ella.

  • Con respecto a las ideas y proyecciones que van teniendo los emprendedores, no debe esperarse a lanzar un producto o servicio perfecto, ya que todo puede ir mejorándose poco a poco, sino que se recomienda probarlo en una etapa inicial. Los aspectos que queden por limar, puede hacerse a posteriori.

  • Hay que rodearse de un buen equipo, de los mejores, que contribuyan al desarrollo y crecimiento del negocio, ya que los resultados no se consiguen solos. Lo fundamental para tener éxito está en la gente con la que se trabaja.

  • Es aconsejable mantener una relación cercana con los empleados. Para que se comprometan con los proyectos e iniciativas se les debe hacer partícipes en ellas, involucrarles en el día a día de la empresa e incluso delegar tareas en ellos resultará beneficioso, tanto para el empleado como para el jefe. De esta forma se conseguirán resultados beneficiosos. Hay que tratar con respeto y buenas maneras a los empleados, hay que provocar positivismo y bienestar y así aumentará la productividad de la empresa.

  • Calidad. Es fundamental la calidad en el trabajo, no hay que conformarse con lo que hay, sino que hay que aspirar a más, siempre que se haga buscando la excelencia.  Esté dispuesto a innovar. Un aspecto clave en cualquier emprendedor es saber diferenciarse del resto para destacar, hacer cosas que nunca se hayan hecho.

  • Aprender del fracaso. Innovar es un camino en el que los errores son una constante. La forma de afrontarlos es admitirlos y corregirlos, identificar donde estuvo el fallo y aprender de los fracasos para futuros proyectos. Las buenas ideas no siempre están condenadas al éxito,  por ello se debe estar dispuesto a fracasar y a levantarse cuantas veces sea necesario. En este aspecto hay que aprender a escuchar y dejar la soberbia a un lado.

  • Debe tenerse seguridad en lo que se hace para que la gente crea en ello. Si queremos que el resto apueste por nuestras ideas y proyectos, nosotros mismos tenemos que ser los primeros que debemos confiar en aquello sobre lo que estamos trabajando.

  • Hay que apostar por el momento, en el presente, ya que nunca encontraremos las condiciones adecuadas al 100%. El lema debe ser : “Ahora es el momento”. Hay que prepararse para las oportunidades y arriesgarse en el momento que se crea adecuado.

  • Evite endeudarse. La deuda no es buena compañera durante un proceso de emprendimiento. Por eso, los emprendedores aconsejan pagar las deudas cuanto antes y darse un estilo de vida más modesto que el que las ganancias permiten