Nuestro mundo cabe en la palma de nuestra mano. Tenemos todo lo que necesitamos al alcance de nuestra mano, o bolsillo en este caso.
A medida que avanzamos, innovamos con nuevas tecnologías que dejan obsoletas las anteriores. Haciendo que cada vez sea más y más complicado conocer todas y cada una de las ventajas de las que disponemos.
Sin embargo, hasta la fecha todos los dispositivos móviles siguen una línea de desarrollo común. Simplicidad, tanto en tamaño como en uso.
Hace 30 años, ni siquiera disponíamos de un dispositivo móvil con el que llamar a nuestros amigos y mucho menos enviarles mensajes.Y si teníamos algo, era algo más parecido a un ladrillo. Hoy en día, cada dispositivo o teléfono móvil es 1.300 veces más potente que cualquier ordenador o calculadora utilizada en 1969 en el lanzamiento del hombre al espacio. Es realmente fascinante que en tan solo 30 años hayamos avanzado tanto en lo que se refiere a tecnología y en cómo la almacenamos.
¿Hacia dónde nos dirigimos?
En este momento, tenemos la capacidad de controlar todos los aspectos que interactúan con nuestra vida desde nuestro smartphone / tablet o teléfono móvil, sin embargo, los expertos predicen que para el año 2030, tendremos la capacidad de controlar todos y cada uno de los elementos con los que interactuamos en nuestro día a día mediante el uso de un dispositivo móvil.
Eso significa que no tendremos la necesidad de conducir (los coches inteligentes lo harán por nosotros), abrir la puerta al llegar a casa (los hogares inteligentes sabrán reconocernos y darnos acceso), pedir comida (en realidad, esta parte ya no tenemos ni siquiera que pensar en ella. Las neveras inteligentes saben realizar la compra cuando detectan falta comida).
Este futuro, o casi presente, de la tecnología es lo que llamamos “El internet de las cosas”. Básicamente describe la idea de tener “todo conectado al mismo tiempo”. A su vez, creando grandes cantidades de información (big data), que almacenamos y manejamos desde nuestros móviles.
Como mencionábamos anteriormente, no afectará únicamente a nuestra vida diaria, sino que cambiará nuestra perspectiva de la realidad. Haciendo que la transición entre Realidad, Realidad virtual y Realidad Aumentada sea cada vez apreciable.
Actualmente si queremos pasar de nuestra realidad hacia la Realidad Virtual o Ampliada, necesitaremos de una ayuda externa. Sin embargo, en el futurom y con la ayuda de la tecnología puntera, tendremos la posibilidad de seleccionar el tipo de “realidad” que queremos "vivir" (probablemente simplemente pensando en ella, ya tendremos acceso) y los dispositivos se ocuparán del resto.
¿Qué ha de mejorar?
La tecnología ya está disponible y en crecimiento y será dificil limitar el impacto que ésta tendrá en la sociedad. Sin duda el mayor punto de conflicto ahora mismo es conocer las responsabilidades y los límites legales ¿Cuál es la línea que separa lo legal de aquello que no lo es?
Y no estamos hablando en términos de aplicaciones, sino del tipo de control o interacciones que los avances tecnológicos tienen en nuestra vida, para una muestra, consulta Inteligencia artificial. ¿Hasta dónde puede llegar?.
También es necesario ajustar la definición del concepto “móvil”, este ha de evolucionar. Yo creo que define más un concepto de accesibilidad que de movilidad.
Puntos en los que los dispositivos móviles han de mejorar:
- UX/UI: Estos dispositivos han de mejorar la interfaz y su manera de interactuar con el usuario antes de que se conviertan en aún más complejas. Al fin y al cabo, no solo buscamos la mejor herramienta posible, buscamos una que podamos entender. Simplicidad en nuestras vidas. De poco sirve tener todas las posibilidades del mundo, sino sabes como utilizarlas a tu favor. La inteligencia artificial de cada dispositivo, ha de ser capaz de reaccionar ante nuestras peticiones sin mucho complejidad.
- Versatilidad: Ser capaz de conseguir la versatilidad completa. Conectar todos los accesorios a nuestro móvil y tener la misma capacidad visual de un monitor, ratón, teclado en un teléfono móvil.
- Flexibilidad: Algunos artículos dicen que para el año 2020 tendremos cristales autorreparables en nuestros teléfonos, así como flexibles. No hay mucha utilidad en la rigidez de los materiales, especialmente si estos se encuentran en nuestros bolsillos. La innovación ha de adaptarse a una demanda que requiere de utensilios menos frágiles en nuestros dispositivos (dentro y fuera). Pantallas 18:9, carcasas de cristal, reconocimiento facial…
Source: computerhoy.com
Los dispositivos móviles (teléfono, tablets…) son el presente y el futuro de nuestra industria tecnológica. Estamos viviendo en una entorno de grandes cambios donde la tecnología e innovación van a dar mucho que hablar en los próximos años.
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David Ayza Enero - Marketing Manager en Apiumhub